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8 de marzo: basta de hambre, miseria y amenazas a nuestros derechos
20 de febrero, por El tiempo no sobra, tenemos las fuerzas — Géneros y Sexualidades, Pan y Rosas, Feminismo, Trabajadoras, Frente de Izquierda, Día Internacional de las Mujeres, Sindicalismo combativo, Movimiento de mujeres, Campaña Nacional por el Derecho al Aborto, Ni Una Menos, Feminismo socialista, #8M, Javier Milei, Feminismos, Resistencia al ajuste, Asambleas barriales, Géneros y Sexualidades, Pan y Rosas, Feminismo, Trabajadoras, Frente de Izquierda, Día Internacional de las Mujeres, Sindicalismo combativo, Movimiento de mujeres, Campaña Nacional por el Derecho al Aborto, Ni Una Menos, Feminismo socialista, #8M, Javier Milei, Feminismos, Resistencia al ajuste, Asambleas barrialesConvocadas por los colectivos Ni Una Menos y Campaña Nacional por el Derecho al Aborto, organizaciones feministas, asambleas barriales, sectores sindicales, movimientos sociales, organismos de DD.HH. y activistas independientes van por la segunda semana de asambleas para preparar las acciones del Día Internacional de las Mujeres.
Si en 2018 irrumpimos, como una marea, para ir por nuestro derecho a decidir y a no morir en los abortos clandestinos, este año tenemos planteado ser fuertes en las calles para derrotar los planes de hambre y miseria para las mayorías populares del gobierno de Milei y sus constantes amenazas contra nuestros derechos y libertades.
Siempre decimos que los planes de ajuste que impone el FMI golpean con mayor dureza a las familias trabajadoras, pero especialmente a las mujeres. No son palabras vacías. Sobre las mujeres sigue recayendo, mayoritariamente, el trabajo de cuidados que sostiene la vida cotidiana. Y cuando, para cumplir las metas con el FMI, atacan a las maestras y la Educación pública, cuando el acceso a la Salud se convierte casi en un privilegio, cuando los tarifazos en el transporte y los servicios golpea los bolsillos y la inflación no cede, las mujeres somos las que dedicamos mucho más tiempo para comprar más barato, hacemos malabares para organizar el cuidado de las infancias con redes de apoyo de familiares y vecinas, estiramos hasta lo imposible la leche, los fideos, el pan.
Las mujeres trabajamos también fuera de nuestra casa. Con salarios más bajos que nuestros compañeros y siendo mayoría entre los precarizados, con trabajo no registrado, como monotributistas o entre las cuentapropistas con magros ingresos. También somos la mayoría de quienes trabajamos en los comedores populares y otros emprendimientos a cambio de un plan asistencial que es apenas la mitad del ya miserable salario mínimo.
Es lógico que todo este panorama aumente el malestar social: la preocupación por no saber si se pueden cubrir los gastos, si se podrá renovar el alquiler, si las patronales o los gobiernos nos amenazan con despidos, si van a iniciar o no las clases, si habrá que comprar remedios impagables o si desde el ministerio anunciarán más recortes en los planes, todo eso aumenta el estrés y los cuadros de ansiedad. No le pasa a una únicamente. Nos pasa a todas. Por eso, solo si estamos juntas, organizadas y peleando en las calles para enfrentar la política criminal de Milei, podremos hacerle frente.
Como si eso fuera poco, La Libertad Avanza amenaza permanentemente el derecho a decidir y a no morir en abortos clandestinos, que ganamos con nuestra lucha persistente. Le doblamos el brazo al gobierno en sus intentos de borrar la diversidad sexual y la violencia de género en algunos artículos de su fracasada Ley Ómnibus; pero insisten con recortes, suspensiones y vaciamiento de programas de atención a las víctimas de violencia y personas LGBTIQ+. Y no paran con su "batalla cultural" contra los feminismos y el derecho al aborto, para quebrar el inmenso apoyo social y la legitimidad que alcanzamos con la marea verde. Por eso, estamos en estado de alerta y movilización. A la clandestinidad no volvemos nunca más.
El tiempo no sobra. Las fuerzas las tenemos. Necesitamos que la CGT y las CTAs vuelvan a convocar a un paro nacional y un verdadero plan de lucha que unifique los reclamos de las trabajadoras asalariadas, que garantice las condiciones para que las trabajadoras informales puedan ausentarse de sus lugares de trabajo y guardias mínimas de transporte para que nos movilicemos. Una gran demostración de fuerzas, en la que confluyan también las estudiantes y las vecinas de las asambleas que vienen de enfrentar la Ley Ómnibus, desafiando el protocolo represivo de la ministra Bullrich y consiguiendo la primera derrota del gobierno de Milei en el Congreso.
Pan y Rosas y el PTS en el Frente de Izquierda creemos que el movimiento de mujeres y los feminismos tenemos que volver a ganar las calles, liderando la lucha contra los planes de la motosierra y la licuadora de Milei. Proponemos esta perspectiva, independiente de todos los sectores políticos que hoy se disponen a colaborar obscenamente con este gobierno, a sostenerlo en su debilidad o a darle más tiempo sin enfrentarlo abiertamente, mientras nos hunde en la miseria a la inmensa mayoría del pueblo trabajador, golpeando con especial ensañamiento a las mujeres, las infancias, las personas mayores y la diversidad sexual. Por eso, te invitamos a sumarte a Pan y Rosas y hacer fuerte esta voz, el próximo Día Internacional de las Mujeres, en todas las convocatorias del país.
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Movilizacion y pedido de justicia tras el femicidio de Nicole
20 de febrero, por Fiske Menuco — Géneros y Sexualidades, Violencia de género, Río Negro, Femicidio, Fiske Menuco, General Roca, Géneros y Sexualidades, Violencia de género, Río Negro, Femicidio, Fiske Menuco, General RocaFamiliares, vecinos y organizaciones sociales y políticas exigieron justicia y presupuesto para un plan de emergencia para víctimas de violencia de género.
En la tarde del lunes, familiares de Nicole Posada se concentraron en las calles Av. Roca y Tucumán, en el centro de la ciudad de Fiske Menuco. Junto a vecinos y organizaciones feministas y politicas exigieron justicia por su feminicidio. La movilización arrancó a las 19hs, pasando tanto por la Comisaría 3°, como por la Ciudad Judicial. La convocatoria finalizó con la familia solicitando acompañamiento de las organizaciones y vecinos para movilizar el próximo lunes 26 de febrero.
La madrugada del sábado 17 de febrero Nicole Posada, de 27 años, fue hallada sin vida en la vereda frente a su hogar, ubicado en el barrio Tiro Federal.
Nicole era víctima de violencia de género. Según cuentan sus familiares, años atrás presentó una denuncia contra el padre de sus hijos. Pero luego él la obligó a retirarla. Oscar Fernando Efrain Carriqueo, pareja de la víctima y padre de sus hijos, quedó detenido poco después del hallazgo del cuerpo sin vida de la mujer. Ella intentó huir, pero su cuerpo no resistió. Nicole era madre de cinco hijos, uno de ellos un bebe pequeño.
Es urgente la necesidad de mayor presupuesto para un plan de emergencia que garantice el bienestar de las víctimas de violencia de género. Incluyendo refugios, vivienda, subsidios y trabajo con derechos. Del gobierno de Milei sólo se esperan más recortes, por eso este 8M el movimiento feminista se prepara para ser miles en las calles y enfrentar el machismo, los feminicidios y el ajuste. La CGT y las CTA se tienen que poner a la cabeza de un nuevo paro y un verdadero plan de lucha que empiece por enfrentar el plan "motosierra" que impacta principalmente en las mujeres trabajadoras.
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La asamblea de mujeres y disidencias de Bahía Blanca se organiza desde los barrios
17 de febrero, por Hacia un nuevo 8M — Géneros y Sexualidades, Bahía Blanca, Provincia de Buenos Aires, Aborto legal, seguro y gratuito, Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), #8M, Ley Ómnibus, Asamblea de mujeres, Asambleas barriales, Géneros y Sexualidades, Bahía Blanca, Provincia de Buenos Aires, Aborto legal, seguro y gratuito, Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), #8M, Ley Ómnibus, Asamblea de mujeres, Asambleas barrialesUn día después de que el Indec diera a conocer que la inflación de enero superó el 20% y que una familia necesita más de 600 mil pesos para no caer en la pobreza, se llevó adelante la segunda asamblea de mujeres y disidencias de Bahía Blanca en el Vagón de La Poderosa, en la que participaron organizaciones barriales, sindicales, políticas, feministas y vecinas del barrio.
Después de haber logrado que retroceda la Ley Ómnibus con la pelea que dieron los diputados y diputadas del Frente de Izquierda en el Congreso, desnudando el plan del oficialismo y de la oposición conciliadora pero también la que se dio en las calles, decenas de asambleas barriales, vecinos autoconvocados, trabajadores y trabajadoras, artistas y estudiantes continúan organizándose contra todo el plan de ajuste del gobierno de Milei, Bullrich y Caputo.
Así en Bahía Blanca se mantiene en pie la Asamblea Abierta impulsada por sindicatos recuperados, organizaciones políticas, barriales y autoconvocados a la que se suman las asambleas de mujeres.
La organización de estas comienza a crecer con decenas de compañeras que vienen preparando un nuevo día internacional de las mujeres (8M), atravesado por la crisis política y social nacional que el gobierno nacional busca profundizar, pero también por la crisis local que el temporal visibilizó y profundizó.
De esta manera, la segunda asamblea de mujeres tuvo lugar en uno de los espacios que fue protagonista de nuclear la solidaridad desde abajo surgida ese 16 de diciembre. Fueron las organizaciones barriales quienes abrieron el intercambio denunciando la situación crítica de los barrios populares de Bahía Blanca, en los que son las mujeres las que se ponen en la primera línea para organizar los comedores que asisten cada vez a más familias, pero con menos recursos que aportan los distintos gobiernos: “Hay compañeras que ponen plata de su bolsillo para pagar las garrafas (que rondan los 15mil pesos) del comedor cuando eso lo tendría que garantizar el Estado”. Además de que hay barrios en donde los comedores dejaron de funcionar porque desde diciembre no reciben alimentos.
Exponiendo que esas mismas mujeres tienen doble y hasta triple jornada laboral, con trabajos precarios, haciéndose cargo de las tareas de cuidado de sus hogares y en los comedores, una tarea de la que se desentienden los gobiernos y las patronales. Incluso teniendo hasta tres trabajos pagos, hay compañeras que son sostén de hogar que adelantaron que sus hijos no podrán arrancar las clases por el costo de la canasta escolar. A esto hay que sumarle el costo del colectivo que ronda los $350, algo imposible de sostener para miles de familias trabajadoras.
La denuncia de la situación habitacional local tuvo un lugar destacado dentro de las intervenciones: algunas familias vivían de manera precaria y hoy, dos meses después del temporal, están peor. Aquellas compañeras que se quedaron sin casa comentaron que al acercarse al municipio para pedir ayuda la respuesta fue nula. “Después del temporal no vino nadie a ver cómo estábamos, qué necesitábamos. Fui una de las evacuadas y de un día para el otro me dijeron que me tenía que ir”. “A Susbielles yo no lo vi nunca. Los delegados que él eligió, dónde están, que dijo que iban a andar en las calles, no los he visto.” “Las personas siguen esperando, cuánto van a esperar, un año, dos, tres.”
Por eso una de las consignas convocantes que se propuso para este 8M fue la exigencia a que se declare la emergencia alimentaria y habitacional, además de la creación de puestos de trabajo con derechos, de la mano de denunciar de conjunto el plan de La Libertad Avanza y la oposición colaboracionista. Además de la defensa de los derechos conquistados como el de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, y la de Educación Sexual Integral, que no sólo peligran por el débil intento de derogación, sino también por el sistemático desfinanciamiento en salud y educación por parte de los gobiernos nacionales, provinciales y locales.
En Bahía Blanca las docentes que se organizaron con las familias desde las escuelas, trabajadores y trabajadoras de la salud, sectores estudiantiles, casas culturales, y las organizaciones políticas y barriales independientes de los gobiernos, mostraron el camino de unidad fortaleciendo lazos de solidaridad entre los afectados por el temporal. El movimiento de mujeres y disidencias que enfrentó a las iglesias, sectores antiderechos y gobiernos, haciendo público lo que se creía privado, cuestionando la legislación del Estado sobre los cuerpos de las personas gestantes, ahora tiene el desafío de aunar fuerzas con las asambleas abiertas, barriales, que fueron parte de tirar abajo la antipopular Ley Ómnibus.
Este 8M puede ser el puntapié para que la marea verde vuelva a plantarse en las calles, poniendo en pie instancias de organización en cada lugar de estudio, trabajo y en cada barrio. Esa es la pelea que nos proponemos dar las feministas socialistas de Pan y Rosas.
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Hacia el 8M: asamblea feminista en La Plata
17 de febrero, por Sumate a organizar — Géneros y Sexualidades, La Plata, Berisso y Ensenada, Provincia de Buenos Aires, #8M, Javier Milei, Géneros y Sexualidades, La Plata, Berisso y Ensenada, Provincia de Buenos Aires, #8M, Javier MileiConvocada por la Multisectorial de Mujeres, trans, travestis, lesbianas y bisexuales de La Plata, Berisso y Ensenada, activistas feministas, LGBTI, organizaciones sociales y partidos de izquierda se hicieron presentes. Un primer paso en la organización y la pelea contra el ajuste que impone el gobierno de Milei.
La asamblea se llevó a cabo en la sede de la facultad de Trabajo Social, bajo las consignas "Abajo el DNU, el protocolo Antipiquetes y Todo el Plan de Ajuste de Milei", retomando las grandes peleas que el movimiento de mujeres y diversidad conquistó en las calles como el aborto legal, seguro y gratuito.
La necesidad de la masividad en las calles el próximo 8M, luego de las importantes jornadas de lucha que fueron fundamentales para tirar abajo la Ley Ómnibus, fue uno de ejes que atravesó el debate en esta primera instancia de debate y organización, donde se resaltó el rol de la posta de salud durante la represión en el Congreso; partícipes en esta reunión.
Otro de los ejes principales fue la exigencia hacia las centrales sindicales- que siguen haciendo la plancha mientras el gobierno de Milei ajusta y hambrea a las mayorías- de un paro nacional. El paro convocado por la CGT y las CTAS el pasado el 24 de enero se hizo sentir fuerte y demostró la fuerza que tiene la clase trabajadora. Las centrales sindicales no se pueden volver a guardar frente a los brutales ataques de Milei.
El debate continuará el próximo viernes 23 de febrero. Una de las tareas hacia el 8M es construir desde abajo una movilización unitaria, llevando estos debates a cada asamblea barrial, a cada lugar de trabajo, y a cada sindicato exigiéndoles paro y movilización para que volvamos a mostrar todas nuestras fuerzas en las calles de manera masiva.
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Fotos/ Enfoque Rojo
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Cuando la violencia sexual la perpetra el Estado
16 de febrero, por El Círculo Rojo — Géneros y Sexualidades, Feminismo, Edición México, Terrorismo de Estado, Violencia sexual, El Círculo Rojo, Dictadura, Géneros y Sexualidades, Feminismo, Edición México, Terrorismo de Estado, Violencia sexual, El Círculo Rojo, Dictadura¿Qué pasa cuando la violencia sexual es parte del terrorismo de Estado? Un libro de Leila Guerriero recupera la historia de Silvia Labayrú y las detenidas de la ESMA. La vigencia de las denuncias del movimiento feminista sobre el accionar del Estado.
· El sábado 10, Roberto Fontevecchia entrevistó a Silvia Labayrú en Perfil. La charla se dio a propósito del libro La llamada de la escritora Leila Guerriero (sale en marzo, ya se publicó en España) sobre la historia de Silvia. Recorre varios temas, entre ellos su detención en la ESMA y la causa sobre crímenes sexuales de la que fue denunciante (con Mabel Zanta y María Rosa Paredes).
· Silvia Labayrú dice en otra entrevista que “las violaciones fueron parte de un plan común en muchos de los campos como forma de arrasamiento de la subjetividad de las secuestradas. Éramos un botín de guerra”.
· En 2006, durante el juicio contra Miguel Etchecolatz, Myriam Bregman (diputada del Frente de Izquierda y abogada querellante de ese juicio que terminó en cadena perpetua) ya decía que “la violencia sexual implementada como parte del terrorismo de Estado, debe integrarse en la figura de genocidio”.
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· Suena obvio pero recién en 2021 hubo una condena por delitos sexuales como parte de crímenes de lesa humanidad. En ese juicio, Jorge “Tigre” Acosta y Alberto “Gato” González fueron sentenciados a 24 y 20 años por abusos y violaciones de mujeres detenidas. Y recién en 2022 la Corte Suprema sentó un precedente con el fallo Martel para no excluir las violaciones en los juicios por crímenes de lesa humanidad.
· El uso de la violencia sexual por parte del Estado continuó en democracia. Hay dos ejemplos conocidos:
· Uno es la represión de San Salvador Atenco (México) en 2006, cuando el expresidente Enrique Peña Nieto era gobernador del Estado de México. El pueblo de San Salvador Atenco se movilizaba en defensa de sus tierras y durante la represión varias mujeres denuncian vejaciones sexuales y que fueron violadas por policías. En 2018, la Corte Interamericana de Derechos Humanos responsabilizó al Estado por esas violaciones y solicitó una reparación.
· Otro más reciente es Chile. En medio de la represión a las protestas de 2019, varias activistas denuncian abusos sexuales de efectivos de las Fuerzas Especiales, Carabineros y militares.
· Entre los testimonios se repite que las detenidas fueron desnudadas, les tocaron los genitales, los pechos, les metieron la punta del fusil en la vagina, les dijeron que las iban a violar y a matar.
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Violencia y disciplinamiento
· El “disciplinamiento de género” fue y es parte de la violencia estatal. El Estado utiliza esas formas de disciplinamiento porque todo el mundo las reconoce y funciona a la vez como una forma de legitimación de esa violencia patriarcal.
· Si existen causas relacionadas con este tipo de violencias es porque existe la movilización de las mujeres, por debates y discusiones que habilitan movimientos como el feminista y la lucha contra la impunidad, entre otros.
· Por eso me parece interesante que vuelva a abrirse discusiones, con esta entrevista a Silvia Labayrú o el libro de Leila Guerriero y que vuelvan en un contexto como el actual, con un gobierno que tiene una vicepresidenta como Victoria Villarruel que defiende a los militares, se respira negacionismo y mano dura.
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· También me interesa rescatar este problema porque en los discursos antifeministas, como los de Milei, suele “tolerarse” como “causa aceptable” es luchar contra los femicidios. Pero la lucha contra la violencia de género es mucho más compleja e incluye al Estado.
· Marzo es un mes cargado de fechas simbólicas, pero me parece una buena oportunidad para recordar que el feminismo o la lucha contra la impunidad no es folclore, es política y es en serio.